Como ya os conté en este post, intentamos hacer un plan en pareja al mes, ya sea comer los viernes o si podemos cuadrarlo con la familia, escaparnos un fin de semana. Nos viene genial encontrarnos de nuevo para hablar, reírnos, querernos, bailar y por supuesto, dormir.
A principios de Octubre tuvimos nuestra lovefest del mes. Aprovechando que nos invitaban a una fiesta en un hotel chulísimo, reservamos una habitación. El evento fue en el Hotel Sant Pere del Bosc Hotel & Spa***** que se encuentra en la localidad de Lloret de Mar, Girona.
Tranquilidad en Lloret de Mar
El Hotel está apartado de todo el bullicio turístico de este pueblo. Se sitúa en medio de una montaña a la que llegas a través de una pista de tierra y todo es bosque alrededor. Un antiguo monasterio del s. X restaurado con sólo 19 habitaciones, cada una decorada de forma exclusiva.
En el exterior hay una piscina de agua salada increíble. No nos pudimos bañar pero nos tomamos un gin tonic la mar de bien. Estábamos tan a gusto que se nos olvidó de que teníamos un acceso al spa con una extensa carta de tratamientos para acabar de desconectar. Daba igual, allí estábamos estirados con nuestro gin hablando de la vida sin más.
El propio hotel tiene su restaurante donde desayunamos pero, anexo al hotel, hay un Restaurante con menú degustación. La fiesta se celebraba aquí por lo que pudimos probar algunos de sus platitos. ¡La verdad que nos encantó!
Y después de cenar…¡¡el baile!!! Así que os podéis imaginar, bailamos y bailamos como si no hubiera mañana.Nos lo pasamos como si fuera la primera noche.
Si podéis desconectar unos días os lo recomiendo y si no podéis desconectar, os lo recomiendo también porque podéis ir con los peques!
Un beso,
No Comment